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Comunidad Digital de Castilla y León
Comunidad Digital de Castilla y León
15 de enero de 2009
Consejería de Fomento
La Pizarra Digital Interactiva, un sistema tecnológico de gran potencia y apariencia familiar que permite al docente convertir sus clases en un espacio facilitador del aprendizaje.
Dar respuesta al interrogante de cómo aprendemos es algo que se remonta a la antigüedad y que ha sido objeto de numerosas teorías e investigaciones por parte de duchos en el tema. El origen de estas reflexiones se remonta a siglos anteriores donde filósofos de la época centraban su interés en resolver esta cuestión.
Dejando atrás las concepciones iniciales propuestas por Ebbinghaus, filósofo y psicólogo alemán, las explicaciones que más repercusión han tenido sobre el aprendizaje son principalmente dos: las conductistas y las cognitivas.
Las primeras centran sus estudios en la conducta del ser humano y señalan que el aprendizaje se construye por la asociación entre estímulos y respuestas sin que para ello intervenga ningún proceso mental del individuo. De este modo, el alumno se convierte en un ser pasivo que recibe las explicaciones del profesor y si responde correctamente a ellas, se verá reforzado por él.
Aunque este enfoque es desterrado por muchos puesto que no asigna al discente el protagonismo último, sin embargo para el tema que nos ocupa, tiene una cierta importancia, ya que, dentro de él, tiene cabida la incorporación de las nuevas tecnologías a través de las máquinas de enseñar propuestas por Skinner que fueron rápidamente desplazadas por los ordenadores en lo que llegó a denominarse “instrucción asistida por ordenador” con unas posibilidades muy superiores. Está claro que ya entonces se vislumbraba el futuro prometedor de las TIC.
Por otro lado, dentro de la aproximación cognitivista y al contrario que el anterior, el alumno pasa a ser un sujeto activo. Pero no será hasta el constructivismo donde esto se convierta en una afianzada realidad y el individuo sea quien adquiera por sí mismo los conocimientos, relacionando lo nuevo con aquello que ya conoce. El papel de los profesores consiste aquí en hacer de guía y apoyo, facilitando el proceso, de tal manera que ayude a la asimilación de contenidos. ¿Cómo hacerlo? ¿Qué metodología utilizar?
Pongámonos en la siguiente situación: clase de arte en un centro de enseñanza cualquiera. El profesor llega puntual a su cita y se limita a exponer, a modo de discurso, la lección magistral que días antes ha preparado.
Veamos ahora esta otra; el mismo profesor decide innovar y apostar por las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías. Su clase esta vez no se reduce a lo anterior, sino que facilita, como hemos dicho antes el proceso de aprendizaje. Sus explicaciones son apoyadas por elementos visuales (haciendo honor al archiconocido refrán “una imagen vale más que mil palabras), completadas por juegos educativos e incluso plantea que los propios asistentes expongan sus conocimientos, trabajos y los compartan con el resto del aula, construyendo entre todos el tema de un modo interactivo.
¿Encuentra alguna diferencia?
¿Cómo hacerlo? Una opción que cada día cobra más peso en los centros de enseñanza es la utilización de una Pizarra Digital Interactiva, un sistema tecnológico de gran potencia y apariencia familiar que permite al docente convertir sus clases en un espacio facilitador del aprendizaje. Esta herramienta está formada por tres elementos básicos conectados entre sí (cable o bluetooth por ejemplo): un ordenador, un videoproyector y un tablero interactivo o pantalla. La clave reside en que, a través de esta pantalla, se podrá acceder al ordenador como si se estuviese trabajando en él, bien mediante un puntero o bien, de forma táctil (algo así como lo que hacen hoy por hoy las personas que nos muestran la predicción del tiempo). Así, se podrá navegar desde ella (siempre y cuando exista la conexión a internet), subrayar, dibujar, borrar y todas aquellas funcionalidades que aporte el software instalado. Pero aquí no acaba todo, una vez finalizado el trabajo, es posible guardarlo e incluso imprimirlo.
Las ventajas son innumerables, pero contar con ella supone modificar la metodología clásica a la que esté habituado el profesor, además de formarse para poder sacarle el máximo partido.
¿Qué se obtiene a cambio?
Nuestra Comunidad es una de las pioneras en la implantación de estas herramientas. La Junta de Castilla y León, contempla dentro de la línea estratégica Servicios Públicos para la Sociedad Digital y del Conocimiento de la ERSDI (Estrategia Regional para la Sociedad Digital del Conocimiento de Castilla y León 2007-2013) la iniciativa Sistema Educativo en la Sociedad Digital y del Conocimiento donde se incluyen una serie de programas que tendrán como objetivos crear y garantizar una enseñanza de calidad y conseguir el acercamiento a las nuevas tecnologías, fomentando su empleo como herramientas de trabajo.